ETICA Y
RESPONSABILIDAD SOCIAL
Una responsabilidad
ética, y no hay ética si no hay libertad
y voluntariedad más allá del control y de la regulación a cargo del Estado.
Claro que es muy tentador tratar de conseguir
los resultados deseados por la vía directa de la coacción, la
prohibición y el control, pero, desengañémonos, esto siempre ha dado malos
resultados para las personas -y, a la larga, para los resultados
No hay una única visión, conducta o esencia
de lo que aquí se nombra como “las personas”, algo así como una meta estándar a
alcanzar como tipología de conducta, creencias o buenas prácticas; sino que su
particularidad y definición emerge de cada individuo en su propio contexto
específico de interacción. El individuo encuentra su propio sentido para ser y
hacer en el mundo de modo ético y responsable una vez que ha encontrado el
máximo valor que le puede dar a su vida y a sus circunstancias cotidianas.
El sentido personal puesto en cada actividad
del quehacer organizacional y de su visión o gestión de la Ética y la
Responsabilidad Social le dará la profundidad necesaria para enfrentar y
liderar los vertiginosos procesos socioculturales sin desorientarse.
Si, como se viene describiendo, el escenario
social es cada vez más complejo e incierto, es muy probable que conocer dicho
contexto de interacción y contribuir a alinearlo con la ética individual,
debería resultar central para cualquier estrategia. En ese punto podrá
encontrar su mayor fortaleza y su mayor riqueza.
Generar estrategias de Responsabilidad
Social
considerando el desarrollo interno y evolución de la RSE así como el de las
dinámicas socioculturales de las que participa, puede, sin duda, tomar varios
caminos y serán eventualmente beneficiosas tanto para la organización como para
la sociedad en su conjunto.
Considerar la ética individual y
la responsabilidad personal, sin embargo, es un punto de apoyo para garantizar
que la generación de valor se eleve hacia su máxima altura.